Tabaco y salud visual


El tabaco no solo afecta negativamente a los pulmones, sino también a los ojos. De hecho, el sector de la población que recurre a este tipo de hábitos posee una probabilidad mayor de contraer alguna deficiencia ocular respecto a los no fumadores. Esta situación podría agravarse en personas con edad avanzada.

El hecho de que el consumo desmesurado de tabaco aumente el riesgo de aparición de patologías relacionadas con la visión es una situación no muy conocida por la población. Concretamente, el humo del tabaco puede provocar picor e irritación ocular, e incluso infecciones que podrían derivar en conjuntivitis, úlceras o lesiones corneales. Además, esta sustancia libera elementos químicos tóxicos en el riego sanguíneo que aceleran el envejecimiento celular, estimulando la aparición de cataratas o degeneración macular, una de las principales causas de ceguera en el mundo.

La posibilidad de sufrir daños en la visión también afecta, en menor medida, a fumadores pasivos que estén expuestos al humo de los cigarrillos en ambientes en los que predomine el consumo de tabaco.